letra vuestra sobre aquell mismo feyto, la qual entendida, vos respondemos que si la dita duena recorrió a nos por dubdo de su persona, e deziendo aquello que dezia, non la emperemos nos injustament como vuestra letra contiene, mas con razon, bien que muyto nos despluviés la ora e fatre adio agora. Como decides que vos e el dicto nieto vuestro nos deseades servir e benir e morir con nos, feytes vuestra naturalesa, e assin lo tenemos nos por firme, qui faziennos sin dubdo por vos e por ell quanto quiera que otro del mundo podrás fer por grandes e bien amados súbditos suyos. Mas no nos semella avengades en dezir que tan vos aportemos a desesperacion que ja sodes desesperados; desesperacion, como sabedes, yes la peyor cosa del mundo; e como tro o lo dixies, vos lo deuriades corregir; e nos, en esti feyto nin en otro, nunca fiziemos nin faceimos, Dios queriendo, cosa porque tales paraulas devan seyer ditas, mayorment por tal como vos sodes. E havent por firme que a nuestro hermano, nin a su parte, la qual desti feyto se tiene por gravada de nos, non queriamos por cosa del mundo haver dado favor en perjudici de la part vuestra. E que nos, si nos ajude Dios, cobdiciamos amigable e buena e amigable conclusion del dicto feyto, e aytanto segund nuestro parecer quan-
