en elogi de S.M. ab motiu de la sua vinguda á Catalunya; poemas que per una part produiren al nostre poeta nous y multiplicats aplausos dels sabis homens de be, y per altre tira criminals y persecucions iniquas de la infernal enveja.
Graves asumptos cridaren al rey á Madrid despres de algun no molt llarch temps de permanencia en Barcelona, y en la marxa disposá que García pasás luego á la cort. Obeí lo nostre poeta, y á breus días de haber entrat á ella S. M., arribá ell, y se quedá de incognit per averiguar tot lo interior y exterior de la capital del regne fins que lo susurro general de que García estaba de incognit en la cort, y la ocorrencia del noy ab Lope de Vega ( que desitjos de coneixerlo personalment feia vivas diligencias per trovarlo ) lo obligá á manifestarse. Esta ocorrencia fou; que pasejant García la campinya de Madrid vegé á Lope de Vega ( á qui no coneixia ) estatich observant un hermos y tendre noy que dormia sobra una pedra, y al acercarse García, digué aquell: O el muchacho es de bronce, ó la piedra es de lana y luego respongué García: Que mas bronce que no tener años once? Y que mas lana que no pensar que hay mañana? Atonit Lope de Vega per la sentenciosa resposta observá lo subgecte, y abrasantse digué Tu eres García á pesar del disimulo.
Disfrutá lo gran García en Madrid lo mateix natural apreci que en Barcelona, y las suas obras poeticas prolamaren en Castilla la excellencia de son ingeni y sabiduria. Adquirí moltas y poderosas amistats de grans personatges; mes també la enveja de sos rivals li proporcioná disgustos de totas clases; pues la infamia de aquells se valgué de tots los resorts per degradarlo y ferlo cauter del favor del rey.
Correspongué García á las finesas y amistat de Lope de Vega, que li fou sempre constant amich y respectador de son merit.
Se presentá pues García al gran Felip, que lo rebé ab son natural agrado y ab novas demostracions de carinyo y favor, dientli; Que descanse que se le esperaba gran fatiga. En efecte apenas pasaba día que lo rey no menás reunir los poetas en palacio, y de repente ferlos executar la composició y representació de las comedias que ell se proposaba. En totas ellas sobrepujá lo ingeni de García, fentse mereixedor de tot lo afecte del rey y dels grandes de la cort, extenentse lo seu nom per tot Castilla: mes al mateix temps no sabent sos rivals rendirse al merit del poeta catalá, y envejosos dels favors que disfrutaba, li declararen la mes cruel guerra, fentli experimentar tota clase de disgustos, procurant ab libellos, falsedats é injurias desconceptuarlo, envilirlo y feril perdrer la amistat del rey y dels personatges de la cort, graduant la ignorancia la sua sabiduria, y de torpesas las suas agudesas. García delicat en la sua bona reputació, se defensá sabiament de las invectivas y calumnias de